Rafael Gustavo Pereyra Rosado

Nació un 29 de julio del 1947 en Padre Las Casas. Un niño normal hasta cumplir el año y medio de edad cuando sufrió una enfermedad que lo dejó discapacitado de la cintura hacia abajo. Por esta discapacidad fue rechazado de la escuela donde fue a inscribirse para estudiar como todos los demás niños, pero la directora de ese momento no lo aceptó.

Tiempo después fue invitado por un amiguito de entonces, Iván Gonzáles (fallecido) para que fuera a inscribirse con él, y por suerte estaba la profesora Mela (fallecida) quien vio el interés del niño por los estudios y lo aceptó en su curso alfabetizándolo y siguió estudiando hasta llegar al quinto curso.

Por motivo de su discapacidad abandonó los estudios y se dedicó a hacer trabajos variados. Carpintería, peluquería etc.

En la carpintería se destacó construyendo casas y haciendo remodelaciones y aunque parezca difícil creerlo se subía hasta las vigas y a los techos a clavar cinc.

Cuando niño construía carros de caja para moverse en la población y también hacía para otros niños. Recuerda con nostalgia un carro en especial fabricado con caja de arenque de tres ruedas para facilitar su traslado por los diferentes sectores. También construía billares por paga.

Construyó un motor de tres gomas con el cual se trasladaba con más comodidad a realizar sus variados trabajos. Este motor todavía lo conserva.

Gustavo se siente realizado, especialmente por haber ayudado a sus hijos a estudiar, aunque para ello halla tenido que trabajar muy duro quizás mas que cualquier otro hombre debido a su discapacidad.

En la actualidad posee un taller de gomería (arreglo de gomas de motores) y reparaciones donde hace de todo, arregla sombrillas, gomas, enraya, plancha y otros equipos. Arregla motores y cualquier artefacto. Tiene equipo como varios tanques para aire, y otros que utiliza en su trabajo.
Su taller se encuentra ubicado en su casa en la calle Santa Ana #4.

Antes de tener este taller tuvo un cine por más de 15 años dando películas en la parte alta de la población.

A Gustavo lo hace ser singular en Padre Las Casas varias cosas:

1. el hecho de que teniendo una severa discapacidad ha procreado una familia numerosa especialmente de varones. Ha sostenido a sus hijos con el sudor de su frente. Nunca ha mendigado. Y ha podido ayudar a sus hijos (algunos) a hacerse profesionales. Franyer, médico graduado en Cuba, Adiel, ingeniero Industrial, los demás algunos son bachilleres y los otros siguen estudiando en la escuela primaria y en el liceo.
2. Ha dado un ejemplo de trabajo, sacrificio, moralidad y responsabilidad a sus hijos lo cual ha servido para que los mismos sean jóvenes y hombres de conducta ejemplares en la población. Esto vale pues, hoy por hoy tenemos un mundo donde impera la violencia, la delincuencia, la inmoralidad, la drogadicción entre otros males, especialmente en la juventud. Los hijos de Gustavo se han mantenido alejados de este ambiente dando con ello plena satisfacción a sus padres y especialmente a Gustavo que los ha criado con tanto sacrificio. Con su conducta estos hijos honran al padre, quien se siente muy orgulloso de ellos.
3. Gustavo es un ejemplo de trabajo y de esfuerzo. Nos da una lección de que cuando se quiere ser un hombre de bien se puede, no importa la pobreza, la discapacidad, los obstáculos, todos se pueden vencer y en medio de la adversidad ser feliz. Como nos lo manifiesta cuando se le pregunta ¿Cómo está Gustavo? E indefectiblemente contesta “bien”, con una sonrisa en los labios.

Ha sido objeto de reconocimiento por parte de diferentes instituciones. Por todo lo anterior Gustavo es un personaje destacado de nuestro pueblo.

“No es la riqueza, ni los ancestros; sino una conducta honorable la que hace grandes a las personas”, (Publio Ovidio Nasón –Poeta latino, 43 A.C.)