Doctor Ramón Santana Reyes
Un Hombre de Extraordinaria Sensibilidad Humana.
Dr. Ramón Santana Reyes
A pesar de ser un médico acostumbrado a ver frecuentemente la muerte de cerca, no deja de conmoverse hasta el llanto cuando la ve llegar y llevarse a uno de sus pacientes, como veremos más adelante.
Llegó Ramoncito (como le llamamos cariñosamente) a padre Las Casas en el año 1976 como médico pasante, esto quiere decir que debía pasar un año trabajando al estado para poder obtener el derecho legal de ejercer la medicina, al final del año le dan por decreto presidencial el EXEQUATUR.
Es Ramoncito el primer pediatra de Padre Las Casas, porque aunque para ese entonces había una pediatra nombrada, nunca vino por lo lejos y el mal estado de la carretera.
Para septiembre del 1977 es nombrado Médico Ayudante, y para 1978 ocupa el cargo de Médico Director, todo esto en la maternidad vieja (donde hoy funcionan varias oficinas del estado).
Durante los años que pasó trabajando en la maternidad vieja pudo observar la necesidad que tenia el Centro Médico y principalmente el pueblo de un pediatra, ya que para ese entonces morían muchos niños por diferentes enfermedades. Del trato diario con niños enfermos se despierta en él la vocación por atender los niños, y solicita hacer una especialidad en pediatría en el Hospital Infantil Robert Reed Cabral, en Santo Domingo.
Motiva su solicitud explicando los motivos que lo impulsan hacerlo: la cantidad de niños enfermos, desnutridos, y sobre todo la cantidad de muerte infantil muchas de las cuales podían evitarse si el área de pediatría funcionara en la maternidad. Es aprobada su solicitud y en el 1978 se va a la capital a estudiar la especialidad por 6 años.
Durante ese tiempo fue profesor de la cátedra de pediatría por tres años, laboró con el Doctor Hugo Mendosa considerado una eminencia en el área, que era Director del Robert Reed Cabral y jefe de la cátedra de pediatría en la UASD.
Mientras hacia su especialidad realizó varios trabajos de investigación sobre enfermedades congénitas, renales e infecciosas junto a los Doctores Hugo Mendosa y Emilio Mena Castro.
Fue Padrino y Asesor de Tesis de Investigación para estudiantes de medicina. Participó en un intercambio de conocimientos con médicos de Guatemala en Guatemala donde duró tres meses trabajando particularmente en el área de recién nacidos.
Durante todo ese tiempo Ramoncito no dejo de venir a prestar servicios médicos a Padre Las Casas, instaló un consultorio privado (1983-1986) donde ofrecía consultas tanto a adultos como a niños a tres pesos la consulta. Fue el primer consultorio privado que funcionó en este pueblo. Al término de los estudios en su especialidad recibe el titulo de Médico Pediatra.
Para 1986 fue nombrado por segunda vez Director de la Maternidad. Desde esa posición luchó por conseguir para el centro médico la plaza de pediatría la cual consigue en el 1988 y voluntariamente deja el cargo de director y asume el cargo de Médico Pediatra, por lo que estudió y se había esforzado y que en realidad le gustaba y le gusta atender a los niños.
Cuando se presentaba un caso que no se podía resolver en la Maternidad refería al niño al Hospital Robert Reed Cabral pero no-conforme con eso, él le resolvía personalmente cualquier tramite en el Robert Reed. Según nos lo cuenta la Doctora Ana Parra.
En el 1990 trabaja como Medico Promotor de la Salud en las lomas de Padre Las Casas por la institución CEPROS. Este trabajo consistía en jornadas educativas, talleres, conversatorios, construcción de fogones y letrinas, eliminación de plagas, entre otras actividades. Este trabajo lo realizaba los fines de semana, pues no descuidaba su labor en la maternidad atendiendo niños.
Para 1994 deja el trabajo de Médico Promotor y se concentra en el Subcentro de Salud, donde todavía presta servicio. Tantos años ejerciendo la medicina asistiendo a miles de niños acumulando experiencia y conocimientos le han enseñado a detectar con tiempo suficiente, cuando un caso esta fuera de su alcance y entonces el paciente es trasladado a otro centro de salud donde haya mayores recursos.
La Parte Humana, relatado por la Doctora Ana Mercedes Parra:
"Cuando Ramoncito permanece un tiempo asistiendo a un paciente logra establecer una relación estrecha con el paciente y los padres, si por mala suerte o cosas de la vida ese paciente muere, el doctor Ramoncito lo llora como si fuera un familiar cercano, si es muy pequeñito llora junto a la cuna del niño por largo rato. Solo de recordar algunos casos y contárnoslo se conmueve hasta el llanto (Ramoncito).
Pero del mismo modo que le duele profundamente la muerte de un paciente o de alguien querido (aunque no sea familiar), con esa misma intensidad disfruta cuando puede triunfar sobre la muerte. Pongamos el ejemplo de José Rodríguez, un niño falcémico de Villa Ocoa. Lo trajeron desahuciado de un hospital de la capital. Presentaba José un estado comatoso con un derrame cerebral masivo complicado con otras enfermedades. Como no respondía al tratamiento lo enviaron a su casa (a morir). Ramoncito a pedido de la madre del niño lo internó y le asistió aplicándole los medicamentos y atenciones constantes, todas las tardes se pasaba rato en la sala con el niño cantándole canciones y tocando la guitarra. Hubo ocasiones que el niño sonreía en medio de su aparente inconsciencia. José fue respondiendo lentamente al tratamiento. A la semana el niño volvió del coma, cuando se recuperó totalmente fue dado de alta y por ahí anda sano gracias a Dios, y de eso hace mas o menos 4 ó 5 años. Ramoncito dice que fue un milagro y se le llenan los ojos de lágrimas de felicidad al recordarlo. Y realmente tiene que haber intervenido la mano divina, nadie le daba un c c de vida al muchacho.
Otro caso es el del Doctor Robert, compañero de mas de 20 años de Ramoncito. El doctor Robert es asmático y hace crisis con cierta frecuencia, en una ocasión hizo una crisis de bronco espasmo, estaba cianótico e hizo un paro respiratorio, cuando Ramoncito vio al amigo y colega en esa condición se fajo a dar gritos, y es que “Los hombres también lloran” ante la muerte despiadada".
El Doctor Ramón tiene su consulta privada en su propia casa y cobra $ 100.00 a veces $50.00 y en innumerables ocasiones nada. Así es El Doctor Santana, para él lo primero es la salud de los niños.
Padre responsable, sus hijos lo aman respetan y admiran. Un ciudadano ejemplar. Orgullo de nuestro pueblo. La Voz Tubanera se siente orgullosa de contar con un hombre así en su pagina. Un Medico de gran sensibilidad humana. Un Personaje Destacado de Nuestra Comunidad.
El Dr. Ramoncito atendiendo a un niño
Pacientes en el área de espera del hospital esperando a ser atendidos por el Dr. Ramoncito.
10 comentarios:
El Doctor Ramoncito es uno de los hombres que vive en nuestro pueblo que debemos valorar, admirar y darle gracias a Dios porque en algun momento de nuestra vida lucho por nuestra salud y la de nuestros hijos. Es una persona muy valiosa.
Que Dios lo colme de bendiciones y le de larga vida.
JALP
Honor a quien honor merece. Ramoncito es uno de los hombres más valioso de nuestro pueblo. Un hombre integro en todo el sentido de la palabra. Que Dios lo bendiga siempre
el doctor ramoncito es una persona verdaderamente humana, de la q luchan mas por una vida q por el deseo de hacerse rico, el un ejemplo a seguir.
esperamos q nuestras autoridades o nuestro pueblo q personas tan valiosa no esperan a q mueran para condecorarlo con placas u otros reconocimientos. Martin Beltre
Este gran ser humano es la representacion de la vocacion a la medicina en su mas alta expresion.
Hay dos cosas en el Dr.Ramoncito que que admiro, su capasidad y su sencillez.
Padrecacenses cuidemos lo que tenemos hoy para no lamentar mañana. El Dr. Ramon es un tesoro que debemos cuidar.
Si Dios le regala solo la mitad de la salud que el ha brindado(Ramoncito) tendremos buen doctor por mucho tiempo.
Que Dios le bendiga!
En la edad que tengo¿? siempre he visto trabajar incansablemente a este caballo de batalla, como han manifestado otras personas,sin pedir factura,porque el trabajo realizado por el Dr.Santan durante tantos años no tiene precio.
No sé; pero a nuestra gente allá le gusta (no a todos)reconocer personas sin ningun mérito,dejando de lado a los que en sí se lo merecen,como es el caso del Dr.Santana y los doctores Soto,Victoria,Robert.
Sólo figense en los nombres de algunas calles,que muchos nos preguntamos ¿Que hizo fulano por este pueblo o por el país para que una calle lleve su nombre?.
El criterio que se toma solo lo saben ellos,los que toman las desiciones,sin tomar en cuenta la participación de los municipes.
Es tal un caso que no me deja mentir,hay una calle que tenia el nombre de uno de los Padres de la Patria y le fue cambiado,violentando una Ley.
No es que la persona no tenga los méritos para que una calle lleve su nombre,sino que ninguna persona está por encima de Duarte,Sanchez y Mella.
ATT. Johnny Alcántara C. Periodista.
La verdad que hemos sido dichozo con tener ha tan gran ser humano,Gracias Ramoncito por querernos,por estar en el pueblo y ser el medico de todos.Un abrazo grande y todo mi respeto,...
El Dr.Ramoncito como cariñosamente se le suele llamar, excelente médico, sin tachas algunas, capaz, honesto y como ser humano no hay palabras para definirlo.
Que el divino niño le de mucha salud suerte y le muchos años para que nos pueda servir como hasta la fecha lo has hecho.
Como médico excelentisisimo y como ser humano no hay palabras para definirlo.
Que Dios lo cuide y le de muchos años de vida para que lo sigas compartiendo con nuestro pueblo .
DR. RAMONCITO LE DESEO TODA LA FELICIDAD DEL MUNDO Y MUCHA SALUD SU AMIGO REMIGIO VICENTE GARABITO DE VILLA OCOA
Hombre luchador de fe, fuerzas,tramquilo, educado, en fín todos los valores humanitario que pueda un ser humano tener, eso es el Dr. Santana,humilde y amable para tratar a con sus pacientes.
Solo me resta desearle mucha salud y suerte con esos dos elementos se logran otras metas.
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