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miércoles, 24 de octubre de 2007

Ezequiel de Jesús Paulino Cárdenas (Paulino)


Ezequiel de Jesús Paulino Cárdenas (Paulino)

Veintidós años viviendo en Padre Las Casas, se considera y lo consideramos un padrecasense de hecho y derecho. De hecho porque su trabajo, su labor en la comunidad así lo acreditan.
De derecho porque 20 años y más residiendo aquí por ley es considerado un padrecasense con todos los derechos incluso el derecho a elegir y ser elegido si así lo deseara.

Paulino vive en este municipio desde 1985, pero ya desde 1970 incursionaba aquí con la crianza de chivos que tenía en El Jobo. En esas visitas observó que el clima era agradable y que el agua y la luz eran permanentes, algo muy deseados en otros pueblos, pues para en ese entonces se sufría de muchos apagones y escasez de agua. Esas condiciones favorables le inclinaron a querer permanecer aquí permanentemente, sólo había una objeción: no habían teléfonos para él poder mantener comunicación frecuente con su familia, su esposa principalmente, la cual por motivo de trabajo no podía residir aquí, salvo visitas ocasionales.

Las condiciones climáticas y la permanencia del servicio del agua y luz le hicieron quedarse y empezó su labor productiva haciendo una siembra de café orgánico, sin sombra (el café generalmente se siembra bajo grandes árboles como la guama), esto le aportaría mayor espacio. No obstante su incursión en el agro, le inquietaba el problema de la poca comunicación con el exterior, salvo el correo, y el servicio era lento y precario, de ahí que se propone instalar por cuenta propia, una central telefónica en Padre Las Casas lo cual era factible por sus conocimientos y vasta experiencia adquiridos tras muchos años de trabajo en la Compañía Dominicana de Teléfonos (CODETEL).

Después de innumerables gestiones, con Paso Morel como socio, y de salvar escollos, y acallar agüeros, de mover teclas, y con la invaluable ayuda de una compañía de teléfonos alemana, y después de obtener la franquicia, o sea el permiso de operar con el Ayuntamiento Municipal, queda instalada la primera central automática telefónica local con capacidad para 100 líneas.

Los teléfonos eran de disco y de segunda mano, y funcionaban con dos dígitos. El contrato costaba RD$150.00 y la renta mensual RD$5.50 para residencias, para negocios el costo era un poco más alto. Luego aumentó la renta progresivamente y los negocios llegaron a pagar RD$20.00 mensuales.

Al principio sólo unos cuantos instalaron teléfonos en sus casas y/o negocios, había mucha reserva al respecto y malos augurios, pero cuando los primeros teléfonos comenzaron a timbrar y la gente a tomar conciencia, y la novedad a ganar terreno fue un ¡“boom”! Al término del primer mes se habían instalado 50 teléfonos y a los seis meses la central estaba llena y hubo que aumentar a 200 líneas.

Volviendo a los primeros teléfonos, cuando se instalaba un teléfono en una casa se le avisaba al que ya tenía el suyo instalado para que marcara el nuevo número, y los muchachitos, Gregorio por ejemplo, corrían a la nueva instalación para oír el teléfono sonando. Era tanta la fiebre, que hubo personas, como Doña Miledys por ejemplo que averiguaba el número que le iban a poner al próximo que fueran a instalar y marcaba ese número aún antes de haber concluido el proceso, ¡imagínese!

Otros se tomaron la tarea de hacerle bromas pesadas a algunos dueños de teléfonos. A La Súper la pusieron a soplar diciéndole que era una prueba que estaban realizando y que no parara de soplar o se dañaba el servicio, “¡sople, sople!” y la pobre mujer soplando sin respirar ni parar. Y así hicieron muchas bromas que quizás usted recuerde, amigo lector. Otros usaban el servicio para vulgaridades.

Pero, en medio de todo, fue creciendo la demanda. Para el 28 de diciembre de 1989 se suplía el servicio telefónico a larga distancia, y el padrecasense ausente, su mayoría en E.U.A. y Puerto Rico sabe lo que eso significó: comunicación rápida y directa con su gente de aquí. ¡Qué maravilla! ¡Qué felicidad!

Para 1991 se aumentó a 400 líneas y ya para ese entonces se marcaban cuatro dígitos. Se comenzó con dos dígitos, por ejemplo, 25 luego cuatro: 0389, hasta 521-0385, y hoy tenemos (809)521-0385. El sistema también se actualizó progresivamente hasta llegar al Sistema Paso a Paso que puede resistir hasta 1,000 líneas. Para 1994 y 1995 CODETEL tenía instalado el sistema Cero Más y DDD. ¡Qué progreso en el campo de la comunicación! Obviamente, la renta básica también aumentaba.

Paulino le vendió a CODETEL en el 1991, pero dejó un precedente de que cuando se quiere se puede, y el pueblo quiso y él pudo, y esa central telefónica y su autor constituyen hoy un hito en el campo de la comunicación de la historia de Padre Las Casas.

Después de concluida la etapa de teléfonos y como ya había experimentado con la siembra de café en Monte Bonito, entonces Paulino se dedicó con empeño, como lo hace con todo lo que emprende, a la agricultura. Observó que la siembra de café no le era rentable porque se incurre en muchos gastos y decide entonces hacer una siembra de aguacate y como experimento, sembró 1,200 matas. Esto atrajo la atención de la comunidad y le decían que estaba loco, pues en esa tierra no se daba nada, ni aguacate, ni naranjas, nada, pero como siempre él siguió adelante con la vista puesta en la meta y tuvo éxito, tanto, que la gente al ver los resultados también empezaron a sembrar aguacates y hoy Monte Bonito es una zona productiva y exportadora de aguacate, constituyéndose éste en una de las principales fuentes de ingreso después del café.


Paulino trabajando en su finca


La foto muestra parte de la producción de café


el frente de la casa de Paulino y Valentina en su finca

Con el tiempo y la experiencia vivida comprobó que la siembra de aguacate convencional no era rentable, pues la cantidad de veneno y sales que se le echa al terreno, con el tiempo lo vuelve estéril, por lo que decide para el 2001 y 2002 ensayar con el sistema orgánico en la siembra de limones para lo cual tiene que producir el humus de lombriz (estiércol de la lombriz) y con éste abonar las plantaciones, lo cual es bueno pues no daña la tierra. Cuando se está en plena producción se cosecha una paleta (una tonelada) semanal, o sea, cuatro paletas mensuales. Es el primer productor de limones orgánicos, los cuales también exporta.

Ahora Paulino, junto a su esposa y compañera Valentina, una persona sencilla, amable, y buena anfitriona, están dedicados a la producción de limones y aguacates, llevando una vida sencilla y tranquila. Viviendo en la tierra que ama y le gusta, Padre Las Casas, Paulino sigue haciendo historia y sentando precedentes.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Contar con un personaje como Paulino es un orgullo para nuestro querido pueblo de Padre Las Casas. Que Dios bendiga esos pasos que llevaron a Paulino a Túbano.

Anónimo dijo...

felicidades al sr paulino por ser una de las personas que llevo el desarollo a nuestro pueblo con sus innovadoras ideas

Rubi

Anónimo dijo...

Sr. Paulino.
Hoy dia ya usted forma parte de nuestra historia. Usted creyo y puso fe en lo que hacia. Tenerlo
en Padre Las Casas es algo grandio
so y pone de ejemplo que trabajando
duro se pueden lograr cosas.
Gracias infinitas por creer en nues
tro pueblo y nuestra gente.

Congratulaciones!!

Atentamente,
Hector German
hecgerman@yahoo.com

Anónimo dijo...

Felicidades Paulino, recuerdo como usted le planteo el proyecto a mi padre (Paso Morel) y hoy en dia estamos viendo los frutos de este gran trabajo.

Matilde Morel